Ahora, una vez finalizado el ejercicio 2018 y habiendo cerrado las cuentas de tu negocio, es el momento de hacer un estudio sobre tu trabajo y el de tus proveedores.
Dentro de este análisis debe plantearse la situación de la gestión fiscal, contable y laboral. Este proveedor es conocedor de las circunstancias económicas y legales de tu empresa y depositaria de importante documentación de la empresa como facturas, nóminas, declaraciones de impuestos, seguros sociales…
Es por eso que, aun no estando conformes con el servicio recibido y/o coste del mismo, un cambio de asesoría puede producir cierto vértigo, pero puede haber razones de peso para plantearse ese cambio.
1. ¿Cuáles son las principales razones para cambiar de asesoría?
- No recibo un buen servicio en relación a lo que pago.
- Pago por unos servicios que no necesito.
- Ha metido la pata en sucesivas ocasiones y he perdido la confianza en ellos.
- Mal servicio, tengo que llamar varias veces para hablar con ellos.
- No me informan de los últimos cambios en la legislación y cómo me pueden afectar.
- Le da igual cómo vaya mi negocio.
- No me siento tranquilo, tengo que revisar su trabajo.
- No me informan de subvenciones y bonificaciones.
Muchas veces estamos tentados a seguir con nuestras asesorías por la pereza que supone realizar el cambio, pero…este cambio es mucho más fácil de lo que parece.
2. ¿Cómo realizar el cambio de asesoría?
Con independencia de la comunicación verbal que realicemos a la antigua asesoría, Rosado Consultora recomienda una comunicación escrita en la que se indique la fecha a partir de la cuál se cesa el servicio anterior, se indican las obligaciones pendientes y se les informa de la documentación que deben entregar y fecha límite para la entrega.
3. Factores a tener en cuenta para elegir una nueva asesoría.
- Pagar sólo por lo que necesitas.
- Posibilidad de crecer dentro de la misma asesoría: aunque se empiece con un plan básico es importante que la asesoría pueda ofrecer servicios adicionales a medida que crece el negocio.
- Transparencia en los contratos, de manera que quede claro qué servicios están incluidos en el precio mensual fijado y cuáles no.
- Sin cláusulas de permanencia.
- Comunicación ágil y rápida.
- Asesoramiento en la organización empresarial de tu negocio para incrementar la productividad.